Budapest: Banderas rojas y cosas fabulosas

Aoife Dowling nos cuenta sus experiencias en Budapest y comparte consejos muy útiles para que su experiencia en la capital húngara sea la mejor posible.

En cuanto bajé de la estación de tren supe que Budapest me tenía enamorada. La enorme entrada a la estación de tren nos dijo exactamente qué esperar de Budapest: tesoros infinitos, arquitectura espectacular y una ciudad cargada de historia.

Para este artículo, he decidido dejar constancia de las principales señales de alarma que me encontré en Budapest y de todas esas cosas fabulosas que no te puedes perder.

Taxistas

"Darn Gone it" (o tal vez un lenguaje algo más duro) fue nuestra única respuesta cuando finalmente convertimos la desorbitada cantidad que nos cobraron por nuestro brevísimo trayecto en taxi.

Los taxistas locales saben inmediatamente si usted es extranjero en la localidad, inflando los precios y alargando innecesariamente los trayectos. Atención.

Dinero

El forint húngaro es el mayor obstáculo que hay que superar cuando se está en Budapest. La moneda está muy inflada: un euro equivale a 310 forint húngaros. Esto puede llevar a una confusión extrema, sobre todo después de tomar unas copas en uno de los muchos bares.

El wiiiiinnnneee.

Nunca me ha gustado el vino, sólo lo pruebo de vez en cuando. Sin embargo, después de mi breve viaje, me convertí en un experto (quizá sea una exageración), ya que el vino no sólo tiene un sabor maravilloso, sino que su precio es bastante asequible. En algunos bares, las copas de vino costaban sólo 1 euro.

Vida nocturna

Budapest tiene mucho que ofrecer en cuanto a vida nocturna. Todos los bares son auténticos y extravagantes. Uno de mis favoritos es el conocido szimpla, que atrae a un público muy simpático y es muy guay por dentro. Hay muchos pub crawls, pero yo recomendaría el del bar de las ruinas por encima del resto. Es increíble cómo se han recuperado estos viejos búnkeres.

Alojamiento

No me alojé en albergues durante mi estancia en Budapest, pero recomiendo totalmente el alquiler de apartamentos, ya sea en Airbnb o en cualquier otra página web. El nivel del apartamento más básico es increíble y es especialmente perfecto si viajas con un grupo. Nos alojamos en dos apartamentos diferentes durante una semana y ambos estaban increíblemente bien de precio y eran muy bonitos.

Sziget

Si piensas ir a Budapest en agosto, no dudes en visitar el festival Sziget. Nosotros nos quedamos 7 noches (mucho tiempo en una tienda de campaña), pero también puedes conseguir pases de un día. Lo recomiendo encarecidamente ya que las actuaciones son fenomenales, en cada esquina de Sziget hay una nueva sorpresa o fiesta. La acampada es dura a veces, pero se sobrevive mucho mejor de lo que se piensa. Por otro lado, mucha gente alquila albergues o apartamentos durante la estancia y entran y salen del festival a su antojo.

¡Los baños!

¿Cómo se puede escribir sobre Budapest sin mencionar los Baños? Una visita obligada. Yo visité los baños durante el día, que es mucho más barato que durante las famosas o, en algunos casos, infames fiestas de los baños. No asistí a ninguna de las fiestas de los baños porque había oído críticas dispares, pero una cosa es segura: ¡será una noche que nunca olvidarás!

En resumen, Budapest es una de mis ciudades favoritas. Se pueden pasar días enteros visitando un sinfín de museos, obras arquitectónicas y exposiciones, se puede ir de compras por los centros comerciales de las marcas más conocidas y los restaurantes son muy variados y económicos (asegúrese de alejarse de las zonas más turísticas). ¿Qué más se puede pedir?